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En la noche

'Mi mano y mi mente te sienten'.
No dejo de pensar en aquel momento, tu mirada fijada en la mía. Ese olor a fresas cuando me acariciaste la mejilla y tus labios mojados por esa manía tan tuya de morderte el labio. Ella también lo percibe, palpitante, cogiendo dureza segundo a segundo.
Nunca pensé que nuestros labios se juntasen entre roces al susurrar, insinuándonos el sexo más sucio, terminando en un beso, fugaz, pero duradero en mi mente. Mi saliva ahora es la tuya, ella lo siente, se humedece.
Mis ganas de tenerte en este instante no son nada insignificantes. Imagino, pero te siento muy cerca, tocando mi dorso, mordiéndome, lamiéndome, exigiéndome más con esos gemidos casi mudos por tanto placer que dices entre llantos no soportar, pero que no dejas nunca de querer. Está lista para ti, lubricada sin necesidad de acariciar, ahora mis manos serán las tuyas.
¿Me deseas?. 
Suenan preciosos tus besos en mi pelvis, pero más lindo es verte sonreír antes de saborearme. Esa mirada tan penetrante que hace fuego sobre mí, deseándome.  
Siento que estallo, queriéndolo hacer sobre ti, porque cada vez que imagino nuestros cuerpos desnudos, quiero follarte. Y a distancia no puedo.


- A.C

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